Cada vez son más los actores que se adentran en la industria de la financiación. Hace unos años se reducían a los clásicos: bancos, cajas, cooperativas de crédito, secciones de crédito y financieras especializadas.
Hoy en día las nuevas tecnologías en la información y la comunicación han abierto el abanico de oferentes de préstamos.
De estas innovaciones, Internet ha supuesto sin duda el “hecho fundamental” que ha permitido su desarrollo. Con un coste reducido, sin instalaciones físicas, y con una localización global estas nuevas empresas están abriéndose hueco en el mercado.
Préstamos de pequeña cuantía y devolución a muy reducido tiempo se están convirtiendo en la punta de lanza de estas organizaciones.
El gran número de operaciones que gestionan obligan a hacer un uso intensivo de aplicaciones informáticas. El software debe ser potente en su operatoria; un préstamo de 30,00 euros y uno de 300.000,00 euros de capital actúan de la mismo modo: apertura, concesión, amortización, liquidación, carencia, morosidad…
Además de la potencia, ya citada, la agilidad y versatilidad en el uso son características exigibles. La solución implantada por Gregal cumple con ellas. Su arquitectura distingue el modelo en dos capas: la capa web y su core bancario VisionCredit.
La capa web hace de interfaz con el cliente y se convierte en el escaparate de la oficina bancaria, ofertando sus préstamos y solicitando las informaciones precisas: datos personales, datos de scoring, bancarios, etc.
VisionCredit genera los ficheros de transferencias SEPA
El core bancario automatiza la concesión de los préstamos atendiendo a los criterios de riesgos. En el caso de la aprobación VisionCredit genera los ficheros de transferencias SEPA para su abono en la cuenta del prestatario. Llegado el vencimiento el sistema emite ficheros de domiciliación SEPA para su cargo al cliente. Si existieran impagos VisionCredit automatiza el proceso de recirculación de la deuda incrementando los recibos con la comisión y moras pertinentes.
Todo un sistema eficiente y eficaz para que la empresa financiadora solo se preocupe por lo que debe “su negocio”.